Don Francisco tuvo como invitada en su podcast El Decálogo del Éxito a Cristina Saralegui, con quien conversó sobre la experiencia de haber sido despedida, como él, de la cadena Univision, cuando ambos eran las más grandes figuras de la televisión hispana.
Cristina le contó al ex presentador de Sábado Gigante cómo fue el momento en el que ella, a sus 63 años, fue despedida de Univision en 2010, luego de 21 años al frente del talk show más famoso de la televisión hispana El Show de Cristina.
Acompañada por su esposo y socio Marcos Ávila, Cristina recibió la noticia de su despido del entonces presidente de la cadena, César Conde, lo cual le provocó una gran depresión, pues desde que comenzó a trabajar a los 16 años de edad, nunca en su vida la habían botado de ningún trabajo.
"Yo vengo de otro mundo diferente, de la prensa escrita, yo vengo de las revistas del Bloque Dearmas (un consorcio de medios venezolanos). Y en las empresas que yo conozco, a medida que tú te pasas muchos años dándoles a ganar mucho dinero, están muy agradecidos contigo y están esperando el momento que tú decidas retirarte para convencerte de que no te vayas", contó.
Pero en cambio, agregó la presentadora, en Univision la echaron a la calle sin explicación y sin motivo, algo que ella no podía creer.
"De lo primero que yo me preocupé es por mi gente, yo tenía como treinta empleados que dependían todos de nosotros. Pero cuando te pasa lo que nos pasó a nosotros, no piensan en los empleados, entonces tú eres el que tiene que decirles 'nos botaron'", contó.
"ME SENTÍ UNA PORQUERÍA DE PERSONA"
Conocida como "La Oprah Latina", la cubana dijo que a sus entonces 63 años, le había dado toda su vida a Univision, quien no le permitió retirarse de trabajar como se hace en este país, a los 65 años de edad.
"Me quedaban dos años solamente para retirarme con honores, con una fiesta bonita, con mis empleados que eran mi familia. Y no esperaron ni esos dos años para hacer lo que hicieron, que fue muy feo.
"Yo me sentí como una porquería de persona. Le pregunté a la persona que nos lo estaba haciendo saber (la cancelación de su show): '¿tú me estás botando?', porque no lo podía creer".
Esa persona (César Conde) le quiso vender la idea de que no la estaba corriendo, que seguiría haciendo "especiales" para la cadena, pero Saralegui le preguntó que quién lo decía, que ella no haría ningún especial para la televisora, y le dijo: 'bye'".
Ella y su esposo se montaron en su auto y se fueron directo a un bar, donde ambos pidieron un martini y seguían preguntándose qué era lo que acababa de pasar, pues no lo podían creer.
Cristina contó que a partir de ese momento cayó en depresión, no por ego o por no estar más en televisión, sino porque después de trabajar durante 47 años, no se veía sentada en su casa sin nada.
Esa depresión, dijo, la combatió trabajando en Telemundo, la televisora de la competencia que la llamó para hacer otro show llamado Pa'lante con Cristina, el cual duró sólo un año, aseguró, por no se pudo ubicar ahí.
"Me sentía como una mujer que le pega los tarros al marido", dijo, pese a que Telemundo se portó bien con ella, rentándole incluso su estudio de televisión, del cual se mantienen hasta ahora.
"QUEDÉ TAN ATONTADO"
Por su parte, Don Francisco contó que a él le notificaron que sería despedido en enero de 2015, luego de conducir durante 53 años Sábado Gigante, el programa con el récord Ginness de mayor permanencia en la televisión.
"Yo decía: 'tengo 75 años, algo puede pasar. Yo había ofrecido hacer el programa con otros animadores más jóvenes, pero eso no se cumplió después. Pero cuando me lo dijeron (que sería despedido) yo quedé tan atontado que anduve en el auto como cinco horas", contó.
Don Francisco contó lo que le dijo la persona que lo mandó llamar para despedirlo (el mismo César Conde), cuando subió a hablar con él.
"Se sentó y me dijo: 'mira, la compañía ha decidido que el programa este año no continúe, termina en el mes de abril, y estábamos en enero", agregó. Pero logró que lo alargaran hasta septiembre de 2015.
El presentador chileno dijo que asimiló la noticia varios días después y hasta entonces se la comunicó a su equipo de trabajo.
"Cuando me lo dijo lo acepté, dije: 'ok'. Creo yo que no se me notó mucho por fuera, pero cuando ya bajé las escaleras y caminé, caminé distinto... como un autómata".
En su caso, recordó, superó la depresión comenzando a trabajar de inmediato con Telemundo, cadena que lo había buscado antes de ser despedido.
"El día que yo terminé en Univision ya tenía un trabajo en Telemundo donde estuve tres años. Pero no fui tan exitoso como fui en Univision", reconoció.
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