Podemos imaginar cosas materiales y también estados anímicos de felicidad, paz y armonía. También podemos visualizar procesos de nuestra evolución espiritual e imaginarnos en el camino hacia la perfección.
¿Qué es visualizar?
Es la capacidad que todos tenemos de usar el poder de nuestra imaginación para hacer realidad nuestros deseos. Esta capacidad se basa en una de las Leyes Universales: la del Mentalismo. Hoy dentro de algunas técnicas alternativas, se le llama visualización creativa.
Recuerda que en aquello que pensamos, en eso nos convertimos. Si además de pensarlo, podemos verlo en nuestra pantalla mental, darle vida y disfrutarlo como si ya estuviera ocurriendo, estamos creando aquello que visualizamos y trayéndolo al presente. Es por esto, que este paso es muy importante para nuestra vida y prosperidad material o espiritual. Podemos imaginar cosas materiales y también estados anímicos de felicidad, paz y armonía. También podemos visualizar procesos de nuestra evolución espiritual e imaginarnos en el camino hacia la perfección, esa ruta de regreso al Hogar de nuestro Padre hasta lograr la Ascensión.
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Determinar lo que se desea manifestar: Por supuesto, que esto sea algo honorable, constructivo, digno del tiempo y el esfuerzo. Asegúrate del motivo que te impele a traer semejante creación del exterior. Deber ser honesto contigo y con el resto del mundo. Recuerda que existe una gran diferencia entre el uso del deseo y el capricho. El uso implica el cumplimiento de la Gran Ley Universal de Servicio. Asegúrate de no basar tus peticiones en la envidia o la codicia. Un verdadero estudiante sacará provecho de este entrenamiento. Toma las riendas, disciplina y controla conscientemente a tu ser interior. Escoge lo que quieres visualizar en tu mente, diseña y haz que se manifieste ese plan en tu vida.
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Declara el plan deseado en palabras y en voz alta: (Tan claras y concisas como sea posible. Escríbelo con anticipación para que no olvides ningún detalle). En esta forma estarás grabando un registro de tu deseo en el mundo exterior, visible y tangible.
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Cierra los ojos, concéntrate y trata de ver dentro de tu pantalla mental lo que tanto ansías que se cumpla. Contempla el hecho de poder crear, visualizar y crear un cuadro dentro de tu propia conciencia que representa tus deseos. Esa capacidad es un atributo Divino actuando dentro en ti. La Vida y el Poder de Dios están actuando dentro de tu conciencia para impulsar hacia fuera, al mundo exterior, el cuadro que tú estás viendo y sintiendo dentro de ti. Luego tú sabrás que Dios es el hacedor mayor.
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Después de realizar la visualización relee tu plan o tu deseo tantas veces como te sea posible durante el día, y siempre antes de dormirte, porque durante el sueño tu mente será capaz de guardar esa imagen y las sensaciones que te producen para poder recordarlas después por medio de tus sueños nocturnos. De esta manera, puedes llevarte todo el deseo o cuadro a tu conciencia para que entre al Gran Silencio del Sueño. Allí será cargada con el más grande Poder y Actividad de Dios, los cuales están siempre del Corazón del Gran Silencio.
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Por ninguna circunstancia debes comentar tu deseo o tu visualización con alguien. Esto es importante porque miles de deseos, ambiciones e ideales hubieran sido convertidos en realidad, si las personas no los hubiesen compartido con sus allegados. Cuando tú decides demostrar una experiencia por la vía de la visualización conscientemente dirigida, tú te conviertes en Ley -Dios-. La Ley del Uno, para quien no hay oposición. Tú tienes que formular tu propia decisión y apoyar tu propio Decreto con toda fuerza. Esto significa que no debes vacilar. Para esto, debes saber y sentir que es Dios quien está deseando ese pensamiento junto a ti y controlando todo lo que se refiere a él. Hasta que esto no sea comprendido plenamente, jamás podrás obtener las manifestaciones de tus visualizaciones.