ALEJANDRO FERNÁNDEZ parecía director de orquesta, claro, añadiendo el toque fashion con una bufanda blanca. Su nueva novia KARLA LAVEAGA iba más sencilla, con un saquito de torero y accesorios que lo mismo eran dorados que plateados. Y muy bonito tatuaje de colibrí en el pie, lástima que apenas se veía con esas medias negras prohibidísimas para el clima de Miami
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ALEJANDRO FERNÁNDEZ parecía director de orquesta, claro, añadiendo el toque fashion con una bufanda blanca. Su nueva novia KARLA LAVEAGA iba más sencilla, con un saquito de torero y accesorios que lo mismo eran dorados que plateados. Y muy bonito tatuaje de colibrí en el pie, lástima que apenas se veía con esas medias negras prohibidísimas para el clima de Miami
