En septiembre pasado Cristián de la Fuente se vio envuelto en tremendo escándalo tras ser exhibido en un video abrazando y besando apasionadamente a una chica en un restaurante de la Ciudad de México, y aunque él negó una infidelidad, lo cierto es que desde ese día "perdió" a su familia.
En aquel momento, el protagonista de telenovelas como Amor Bravío y Fuego en la Sangre dijo a Telemundo haber cometido "un error de borracho" y sentirse arrepentido por lo sucedido, pero al parecer esa explicación no fue suficiente para su esposa Angélica Castro, de quien desde entonces está separado.
Entrevistado por Gustavo Adolfo Infante para el programa El Minuto que Cambió mi Destino, el chileno reconoció sentirse muy enojado consigo mismo por haber roto el vínculo familiar que fue construyendo durante dos décadas.
"Fueron 20 años maravillosos (de matrimonio) hasta que en septiembre pasado cometí un grave error al hacer una estupidez públicamente: darle un beso a una mujer que no era mi esposa.
"Más que faltarle al respeto a mi mujer y a mi hija es hacerle un daño y una humillación que fue duro, es duro hacer sufrir a quien uno ama… Es muy duro dormir todas las noches con el sentimiento de que el que le hizo daño a mi familia y el que rompió y fracturó mi familia fui yo, entonces es una rabia constante conmigo.
"Perdí a mi familia, perdí ese núcleo que éramos los tres. Si bien tengo una relación con mi hija, reparar el daño que le hice a Angélica (Castro), que es la última persona a la que me hubiera gustado hacerle daño. Desde ese día ya no estamos juntos y es duro", reconoció.
El periodista le cuestionó si contempla el divorcio como una opción, y el galán de telenovelas respondió que aunque le está dando el tiempo a su esposa para sanar, el tiempo los ha ido distanciando.
"Hoy en día legalmente seguimos casados, no hemos tomado ninguna decisión drástica en ese sentido, pero estamos viendo. También fue algo que pasó hace poco, que en un principio tratamos de reparar y después viene la distancia, los viajes, vienen chismes, vienen cosas, no es fácil.
"Yo creo que las decisiones no hay que tomarlas nunca en caliente. Yo hasta el día de hoy me arrepiento de lo que pasó, pero obviamente Angélica necesita un tiempo para sanar, para ella decidir qué quiere hacer ella y eso no se puede parar… Lamentablemente cada vez que pasa el tiempo uno se distancia y no sé, yo vivo un día a la vez", expresó.
Cristián también reconoció que hoy ve que en ese entonces su relación de pareja no estaba pasando por un buen momento, pero que su forma de actuar no fue la correcta porque expuso a su esposa a la humillación en Chile y a que ella perdiera la confianza en él.
"Se lo he dicho un millón de veces de que hice las cosas mal, obviamente uno hace las cosas mal cuando lo mira en retrospectiva, porque obviamente yo no estaba bien, la relación no estaba bien si yo estaba haciendo eso.
"No me cuidé, lo hice pésimo, la expuse, la humillé, humillé a mi familia y le he pedido mil veces perdón, pero a veces el perdón no basta porque cuando algo se rompe, a veces es difícil pegarlo y ya no hay vuelta atrás, pero obviamente no me hubiera gustado que eso hubiera sucedido nunca", comentó.
Respecto a su hija Laura, De la Fuente dijo que aunque su imagen como padre se vio dañada, ha cuidado la cercanía y confianza con ella.
"Afecta porque está la imagen del hombre, la imagen del papá que se ve afectada. Al final del día el papá falla y el papá le falló a la mamá. Con Laura tengo una confianza (para decirle) de que no todo lo que se habla obviamente es verdad, y yo con ella tengo esa relación de poder tener esa cercanía con ella", compartió.
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