- 1 manojo de aceptación: reconocimiento que la vida y la muerte no dependen de uno.
- 3 cucharadas de gratitud: encuentra el valor y el aprendizaje que te dejó la persona.
- 1 sobre de fe: creer que hay algo más grande que sabe por qué suceden las cosas.
- 1 pizca de fortaleza: recordar que solamente se necesita vivir un día a la vez.
- 1 libra de sensibilidad: permiso para sentir dolor y poderlo sanar.
- 1 pieza de sentido común: encontrar una buena razón para seguir viviendo.
Hacerla diariamente y la acompañamos del siguiente decreto:
Decreto:
Acepto mi dolor con compasión, reconozco mi pérdida y me doy tiempo para sanar; de nada sirve sufrir, sentir enojo o reprochar lo que no se puede cambiar; vivo y viviré feliz y agradecido.