Aunque Pablo Montero calificó como "una bola de tonterías" la versión de que dejó plantado a casi 3 mil extras, actores, técnicos y producción para la última escena de la segunda temporada de El Último Rey en el Estadio Azteca, Juan Osorio lo confirmó y aseguró que no quiere trabajar más con el actor.
Luego de que TVnotas publicara la versión de un allegado a la producción, en la que narraba la pesadilla de trabajar con Pablo Montero en la bioserie no autorizada sobre Vicente Fernández, el actor y cantante salió muy ofendido a desmentir todo, y diciendo que jamás llegó borracho a las grabaciones.
Pero no contaba con que el productor confirmaría que fue verdad, que a Pablo no le importó que se había rentado el Estadio Azteca para grabar la última escena de cuando Don Chente se despidió de su público.
"Yo lo defendí a capa y espada para que hiciera este personaje, y no es posible que uno de los tantos días, el último sobre todo, no se presentó a la grabación. Dejó plantados a sus compañeros actores, al equipo técnico, a toda la renta de un estadio y a extras", dijo el productor en entrevista con Gustavo Adolfo Infante en su programa De Primera Mano.
A Osorio le pareció tal la falta de profesionalismo de Pablo, que a la fecha, dijo, no ha cruzado palabra con él y explicó por qué.
"Lo que tiene que hacer es venir a mi oficina, presentarse físicamente y ofrecer una disculpa a la falta que tuvo como gente profesional", señaló.
A pregunta expresa de si no volverá a trabajar con Pablo mientras éste no se disculpe, Osorio respondió.
"Si me lo preguntas ahorita, no tengo ningún interés de trabajar con Pablo Montero", respondió.
El productor reconoce que Pablo hizo un gran papel personificando a Vicente Fernández, pero advirtió que no hay que olvidar que el actor padece de "una enfermedad" y "una adicción" que es muy difícil de superar si no se tiene el valor de hacerlo.
"Pablo es una persona que cuando le gana la enfermedad es muy difícil", dijo, y aclaró que se refiere a la enfermedad del alcoholismo, algo que Osorio vivió en carne propia hace algunos años.
Contó que como él sabe lo que es ser alcohólico, cuidó a Pablo durante todas las grabaciones, llamándolo a las 2 o 3 de la mañana para ver que no estuviera enfiestado, y que él único día que no lo hizo, en la última escena de la segunda temporada, Pablo se emborrachó.
Osorio considera que hasta que el cantante no se dé cuenta que su alcoholismo está atentando contra su vida y su carrera, no lo podrá superar.
El productor también confirmó que Pablo llegó tomado a la fiesta que ofreció la producción para celebrar el final de la serie, y que fue verdad que tuvieron que suplir su escena final con el actor Jesús Moré, quien interpreta a Gerardo, uno de los hijos de El Charro de Huentitán.
"Yo no quise que (Pablo) grabara, yo estaba muy enojado, (en la fiesta) me quiso abrazar y lo dije 'no quiero hablar contigo, no te quiero ver'".
"Lo primero de debió haber hecho era llegar con sus compañeros actores y técnicos a ofrecerles una disculpa por la falta de respeto, y no se diga con el productor y los directores, eso es lo que me disgustó mucho, que no tuvo la humildad de disculparse", dijo.
"No puede ser tan cínico en la vida cuando cometes ese tipo de errores y le faltas el respeto a tu carrera y a todos los que conformamos un proyecto".
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